sábado, 30 de noviembre de 2013

Homenaje de la AEV al Negro Maury


Hoy día del Escritor y natalicio de don Andrés Bello, la Asociación de Escritores, conjuntamente con la Fundación Poetas del Río, rinde familiar y cálido homenaje a la memoria del profesor Diógenes Troncone Sánchez, por todo cuanto él significó para la educación, el periodismo y las letras bolivarenses.
         El homenaje hoy a las tres de la tarde será en la Casa de la Poesía frente a la Casa del Almirante Brión (Plaza Bolívar).  Se escogió este espacio por ser su sitio se tertulia  como Secretario General o simple afiliado del gremio de escritores fundado en 1935 en Ateneo de Caracas y extendido a la provincia tras la caída del dictador Juan Vicente Gómez.
         Correspondió al antropólogo Miguel Acosta Saignes, quien fue profesor de Diógenes Troncone en la UCV,  ser el primer presidente de la Asociación de Escritores de Venezuela, seguido por notabilidades como Arturo Uslar Pietri, Díaz Sánchez, Luis Pastori, Pascual Venegas Filardo, Rómulo Gallego, José Ramón Medina y otros que serian largo enumerar pero que le dieron a la Asociación el cuerpo y la solides gremial que conforman 24 seccionales, entre ellas, por supuesto la de Ciudad Bolívar.
         Diógenes Troncone no sólo fue miembro de la AEV sino singular miembro muy dinámico de la comunidad bolivarense. Fundador del gremio de periodistas, de la AEV y de varias instituciones educacionales públicas y privadas, miembro activo del Colegio de Periodistas, del Colegio de Profesores y de la Asociación de Escritores, fue  una personalidad muy peculiar, dedicado a servir, con un profundo sentido de lo humano.  Era de los que prefieren dar un  paso atrás y analizar antes de seguir adelante.  En cierto modo, práctico, leal, trabajador, crítico de sí mismo y de los demás.  Este era la personalidad de Diógenes, acaso modelada por el constante ejercicio de la docencia que se tradujo en su relación con la gente y en sus escritos periodísticos, libre de eufemismos, directos, sin que por ello carecieran de la sazón de la sal, atenuada con la meliflua propiedad del azúcar. Tal vez por ello sus artículos  firmados con nombre propio se distinguían con el pre-título “Sal y Azúcar” y no como en sus primeros tiempos “Rompiendo la Zaranda”, que solía firmar con  seudónimo; no para ocultarse, sino en homenaje a la familia que lo había criado y formado como verdadero hijo, aunque los Maury venidos de Valencia, eran blancos y él tenía la piel algo quemada, buscando a su madre María Magdalena Sánchez, una culisa atractiva. De suerte que “El Negro Maury”, no era tan seudónimo rayano en lo anónimo porque toda la ciudad sabía de antemano de quién se trataba.
Troncone, quien falleció  a la edad de 75 años,  dejó varios libros inéditos, entre ellos, El Correo del Orinoco, La Nueva Educación en Europa, La Opinión Pública, Perfil de Liderazgo, La Comunicación Insonora y la Pedagogía de J. F. Reyes Baena, los cuales respaldaron su condición de miembro de la Asociación de Escritores de Venezuela, Seccional Ciudad Bolívar. La AEV le publicó un opúsculo sobre “Canaima”, la novela de Rómulo Gallegos y la novela “La ciudad de piedra”. No obstante haberse especializado en Historia y Geografía nunca dictó en aula esta materia, en cambio ejerció como profesor de Filosofía y Psicología.
Murió sin estar convencido de la llamada “segunda vida”.   “De esa ilusión no vivo, soy escéptico en tal sentido como bien lo soy al no creer en esoterismo, brujería, espiritismo y prácticas por el estilo. Soy realista sin llegar a ser materialista, por esa razón no quise seguir la abogacía. Habría tenido que renunciar a las cosas que espiritualmente me llenan”.


viernes, 29 de noviembre de 2013

Mara Vitanza en el Museo Soto


Mara Vitanza (viernes 10 am) expone sus piezas de barro y fuego en una de la salas del Museo de Arte Moderno Jesús Soto para cerrar el ciclo de su periplo de artista con broche de terracota y gres iniciado en Florencia hace más de cincuenta años.
         Ya está, como quien dice, en la etapa última de su vida y no quiere irse sin dejar la impronta de su arte en la memoria de los bolivarenses.  La impronta de lo que fue capaz de hacer con la arcilla de las milenarias tierras del Orinoco.
En su espaciosa casa de la calla Maracay vive y trabajó durante muchos años dibujando, pintando, modelando el barro y exigiéndole al fuego lo que debía  dar para que la obra fuera feliz.
Mara no sólo es flo­rentina por haber nacido hace siete decenios en aquella tierra etrusca, si­no fundamentalmente porque es artista. Flo­rencia es desde que fue República de los Medici, centro artístico y literario de renombre.  Pero Mara Vitanza es guayanesa porque, aunque vino de allá, “Maturista artística”, es aquí donde se realizó  tal como su esposo, Francisco Vitanza,  cuando vino al país para junto con Gabaldón combatir la malaria que estaba diezmando a Venezuela. 
Primero vivió en Barinas donde nació Ricardo y luego en Maracay donde advino  Roberto, siguiendo  a Ma­turín donde nació Darío. No tiene hijo guayanés. Sus únicos hijos angos­tureños son su arte y su "Reinita", un diminuto pájaro que fabricó su nido en la colgante araña de cristal sin im­portar la gente ni el ti­tilante reflejo de la luz. ¿Cómo puede un pajari­llo atravesar una rejilla de dos centímetros cua­drados para llegar hasta la sala de la quinta a ha­cer su nido?
 Mara en­cuentra la explicación en su acendrado amor por los pájaros y eso se ad­vierte en la predomi­nante temática de su obra. Los pájaros están allí, desde el pichón ham­briento que aletea y grita su hambre a todo pulmón hasta el que se encuentra sumergido en ese lenguaje abstracto de la forma a lo Henry Moore.
En Guayana, Mara encontró la paz  que el Duce Benito Mus­solini le negó a su patria cuando entró en alianza con el III Reich. Esa pa­tria toda península sem­brada en el Adriático quedó maltrecha por las bombas de la II Guerra Mundial. Afortunada­mente Roma, Venecia y Florencia fueron acep­tadas como ciudades abiertas, pero una que otra vez los equívocos malograron los términos de la excepcionalidad y tres veces en Florencia las nubes de bombar­deros aliados taparon el Sol y oscurecieron la ciu­dad. Mara está viva de milagro. Uno de esos mil dioses mitológicos que rigieran la vida de las dos grandes penínsulas mediterráneas la salvó, o, acaso, fue el Dios de todos los dioses, el que hoy está con ella, en su arte y en su esperanza? Tal vez. Lo cierto es que está aquí en el Museo  modelando la realidad de la materia que no es la que todo el mundo ve sino la que ella percibió con sus pro­pios mecanismos ner­viosos, humorales y bio­catalizadores, en fin, con sus vibraciones que vienen del propio cosmos con el cual está empatada desde su nacimiento.
Vive enamorada de Ciudad Bolívar.  Un día me dijo “La gente de Ciudad Bolívar tiene un encanto natural fascinante, es como el agua fluida de su gran Río, le discurre a uno por todo el cuerpo y uno se siente entonces como en paz con todos y con uno mismo. Por eso lo que sé nunca fue mío.  Lo entregué todo a mis alumnos de la Es­cuela "Alejandro Coli­na" que fundé.


jueves, 28 de noviembre de 2013

Origen Primario del Diamante


Dos profesores, uno del Instituto de Geociencias de la Universidad de Sao Paulo y otro de la Escuela de Geología y Minas de la Universidad de Oriente,  dieron a conocer en el mes de julio de 1975, los resultados de una investigación  sobre el origen primario de los diamantes que se producen en Guayana.
         Los doctores Darcey Pedro Svisero, de Brasil, y José Baptista Gomes (en la foto), de Venezuela (en la foto), presentaron un trabajo concluido en el cual demuestran que los diamantes de Guayana, al menos los de Quebrada Grande, en el Guaniamo, tienen el mismo origen de los que se producen en el África y Liberia.
         El doctor Darcey Svisero utilizó los laboratorios de la Universidad de Indiana para llegar a sus interesantes conclusiones, las cuales dio a conocer a los profesionales y estudiantes de Ciencias de la Tierra durante una hora de conferencia en el Auditorio del Museo de Geología y Minas de la UDO.
         Haciendo un esfuerzo por hacerse entender en su lengua lusitana, el profesor de la Universidad de Sao Paulo dijo que en las muestras de diamantes recogidas en el Guaniamo, encontró inclusiones singenéticas de olivino, piropo y otros elementos cuya                                         paragénesis es semejante a la de los diamantes del sur de África y Rusia, provenientes de kimberlitas o rocas ultrabásicas.
         Durante ese año la producción diamantífera del Río Guaniamo se incrementaba de manera tal que el doctor Roberto León Chuecos, comisionado del gobierno central para los asuntos de las minas, propuso la creación de un Banco del Diamante en Caracas con sucursal en Ciudad Bolívar y centros de producción.
La Cámara de Comercio, entonces presidida por el doctor Andrés Bello Bilancieri, respaldó la idea, pero objetaba que la misma  contradecía la política de descentralización del Gobierno al pretenderse a Caracas como sede principal de dicho Banco del Diamante.
Las primeras empresas que se constituyeron en Venezuela con el objeto de explorar y explotar nuestras riquezas diamantíferas fueron; la Compañía Anónima Minera de Diamante El Pao y la Compañía Anónima Santa Bárbara, las cuales iniciaron sus actividades en 1937. Otras em­presas pioneras fueron el Sindicato del Caroni y la C.A. Minera y Comercial y, posteriormente, la Compañia Venezolana del Diamante.
Las concesiones otorgadas para la explotación del diamante abarcan una superficie de 6.217 hectáreas y dentro de la zona de reserva nacional para la explotación de este mineral, formada por el Territorio Federal Ama­zonas y toda la parte del Estado Bolívar situada al sur del paralelo 6°se decretaron áreas de libre aprovechamiento.
La producción del diamante en Guayana, se obtiene en su tota­lidad por este sistema, en zonas declaradas corno tales por el Ejecutivo Na­cional, con el fin de amparar la explotación que hacen los mineros ambulan­tes, debido a que las compañías concesionarias están paralizadas desde hace tiempo.
Hasta el momento, en la producción venezolana de diamante, se pueden distinguir 4 periodos. El primero, desde 1937 hasta 1945, en el cual el promedio de la producción se mantiene en unos 18.000 quilates por año. Desde 1946 hasta 1955, se nota una tendencia de crecimiento en la producción. Entre 1956 y 1960, la tendencia es más bien a la baja y finalmente, desde 1961 hasta nuestros días, en que la producción aumenta de nuevo, hasta llegar, en 1970, a la cifra récord de 508.661 quilates.
Por ser la explotación del diamante un aspecto de la economía nacional que puede adquirir enorme importancia, el Ministerio de Minas e Hidrocarburos consideró en esa ocasión conveniente iniciar el Programa del Diamante, a fin de lograr una definición certera de la potencialidad de ese recurso mine­ral.






miércoles, 27 de noviembre de 2013

Nedo en el Museo Jesús Soto

Nedo, un pintor ítalo venezolano, del que se hablaba mucho en 1974, expuso a fines de marzo en el Museo de Arte Moderno Jesús Soto parte de su serie Reversámbito con la cual experimentaba resolver un problema de carácter espacial y de luz que lo obsesionaba.
         Soto había logrado la combinación de tiempo y espacio que es algo que se venía persiguiendo desde hacía mucho tiempo.  Él, en cambio, buscaba otra cosa y pudo al fin lograrlo, alterar la perspectiva de un hecho geométrico cumplido. Nedo lo logró con su serie “Reversánbito” o ámbito reversible que es un espacio que se devuelve sobre el mismo, tergiversando la perspectiva.
         Para ello, Nedo se valió del blanco como color único y dominante que cubre impecablemente variadísimas formas geométricas superpuestas sobre un fondo básico de madera tamaño gigante.  Es un problema de luz que juega un papel importante en su obra y el blanco se presta admirablemente para ese juego.  Además del blanco hay otro color casi imperceptible que le trasmite la luz.
         En esa ocasión el Maestro Jesús Soto adquirió dos obras de Nedo, asociados en una unidad, para patrimonio del Museo de Arte Moderno.  Esa obra formaba parte de la exposición de veinte piezas que fueron expuestas en la Sala Uno.  La cromovibrofonía del compositor Antonio Esteves que ambientaba todas las salas se adaptó admirablemente a la exposición.
         Nedo, nacido en Milán en 1928 y residenciado en Caracas desde 1950, venía de exponer en el Museo de Bellas Artes y allí volvió a exponer meses después numerosos diseños gráficos con motivo de la edición de su libro Letromaquia”, editado por Publicaciones Refolit y el cual recoge letras y números diseñados por él durante su larga vida de pintor. 
Nedo Mion Ferrario nació el 23 de septiembre de 1926 y está, considerado pionero del diseño gráfico venezolano.
Diversas generaciones de venezolanos adquirieron sólidos conocimientos del diseño, la tipografía y el dibujo gracias al patrimonio histórico-artístico legado por quien fue un diseñador y artista muy prolífico y hábil acuarelista e ilustrador. Gran parte de su vida la dedicó al diseño y la docencia.
Nedo diseñó unos sesenta alfabetos para ser utilizados en carteles, catálogos y logotipos, algunos de ellos dentro de la denominada familia Imposible, otros identificados como Reversibles y Computables. Dichos alfabetos radicaban en la realización de un trabajo sin descanso, movido siempre desde una exploración profunda y coherente de la geometría. Su pasión por las formas imposibles y la fabricación de ilusiones ópticas de tipo geométrico fueron los valores fundamentales y más característicos de su obra.
Buena parte de su aprendizaje la obtuvo de su padre, Emilio Mion Vianello, quien era cincelador, un oficio de linaje en Italia. A a finales de la Segundaguerra Mundial ambos decidieron abandonar Italia debido al clima político de aquellas fechas. Animados por la política venezolana de inmigración llegaron a Caracas en 1950.
Gracias a las relaciones públicas de su padre, uno de los primeros trabajos que tuvo en Venezuela fue la realización de una serie de ilustraciones para un periódico denominado "El País" y suplemento del diario “La Esfera” así como para otros proyectos didáctico-comerciales como el diseño de emblemas, logotipos, revistas, catálogos, carteles y campañas publicitarias para distintas marcas venezolanas y extranjeras.

Entre 1952 y 1953 realizó trabajos eventuales para la agencia de publicidad venezolana ARS Publicidad. Este trabajo va desde el diseño de las cajas de cigarrillos marca “Negro Primero” y “Alaska” hasta una extendida campaña de la transnacional petrolera Mobil. En 1959 asumió la dirección artística de la revista “El Farol”de la Creole Petrolium.

martes, 26 de noviembre de 2013

Museo Geológico y Minero


El 17 de junio de 1973, sin muchos afanes publicitarios ni afectados protocolos, abrió sus puertas el Museo Geológico y Minero de Guayana en Ciudad Bolívar, cuyo interior es un mundo fascinante de muestras de toda la riqueza mineral de la tierra.

Más de dos mil muestras de minerales, rocas y piezas mecánicas relacionadas con su exploración, prospección y explotación, distribuidas estéticas y técnicamente en cuatro secciones, puede observar el visitante en una antigua casa de huéspedes convertida por obra y mérito del profesor José Baptista Gómez  (en la foto), en un museo.
Vivo y dinámico, concebido para el trabajo, la investigación, el conocimiento y la divulgación de los elementos mineralógicos de la Tierra, vino a cristalizar cuatro años después de haber sido lanzada la idea. En él, estudiantes y el común de la gente encuentran una lección permanente con todo lo vinculado con la Ciencia de la Tierra y los recursos no renovables.
El museo creado por resolución del Núcleo Bolívar de la Universidad de Oriente en marzo de 1971 con el visto bueno del Rectorado, contó con la extraordinaria colaboración de las empresas petroleras, del hierro y el acero, casas comerciales y entidades públicas.
La estructura técnica del Museo Geológico y Minero de Guayana fue concebida a base de salas de exhibición, oficinas, taller de preparación de muestras, dispositivos de instalación, de conservación y un auditorio de conferencias y proyección audiovisual de documentales científicos e industrial.
El desarrollo de las instalaciones está concentrado en el Campo Norte de La Sabanita y utiliza como unidad inicial -primera etapa- la llamada “Casa de Huéspedes” que cuenta y exhibe las colecciones básicas necesarias repartidas en Sección de Mineralogía y Petrología, Sección de Paleontología y Geología Histórica, Sección de Minas y Sección de Recursos Minerales de Venezuela.
Desgraciadamente el doctor José Baptista Gómez, fundador del Museo e investigador sobre el génesis de nuestras piedras preciosas, fue víctima mortal en Caracas, de la delincuencia que asedia y asecha impunemente a la Venezuela actual.
La idea de un museo en la Escuela de Geología y Minas de la Universidad de Oriente venía desde muy atrás Según el doctor Baptista, la semilla fue sembrada en los primeros albores de la creación de la UDO. Lo que pasa es que ideas como ésta son siempre de gestación larga y sólo vino a germinar años más tarde, el 16 de diciembre de 1969, fecha en que por resolución del Consejo Directivo de la misma Escuela lo nombró como organizador del Museo Geológico y Minero de Guayana.
Laborioso y duro fue el esfuerzo para abrir paso a una idea que parecía haber nacido sin la obligación de marchar a prisa sino lentamente. Sin embargo, como todo esfuerzo conlleva a tener éxito, logró por resolución de la Dirección del Núcleo del 22 de marzo de 1971, con la recomendación del ciudadano vicerrector Administrativo y con el visto bueno del ciudadano rector, convertir la llamada “Casa de Huéspedes” como local de exhibición de la primera muestra del museo. Finalmente, para el año de 1972, se otorgó un pequeño presupuesto que, juntamente con algunas donaciones y la colaboración de prestación de servicios no remunerados, permitió hacer realidad este viejo proyecto.
La obra, aunque no lo parezca, involucró un esfuerzo paciente y absorbente, una labor en fin tan fácil de criticar como difícil y compleja de realizar, toda vez que por razones de su propia índole es muchas veces una labor de convencimiento.
En ciertos casos el doctor Baptista se cuidó de que las palabras no pesaran demasiado a la hora de reclamar o exigir.

lunes, 25 de noviembre de 2013

Ramón Cotúa


Telmo Almada marcado por el 14


El 14 de octubre de 1973 falleció en Ciudad Bolívar el músico y compositor Pedro Telmo Almada, o simplemente “Telmo Almada” como prefería.   Una coincidencia, pues había nacido también un día 14, pero de abril de1901 allá en Zaraza del Estado Guárico.
Y coincidencia aún mayor, se radicó para siempre en Ciudad Bolívar un 14 de octubre de 1923.  Si hubiera sido supersticioso habría jugado siempre ese número en la Lotería que dicho sea de paso, signó la esquina de la antigua mansión de don Virgilio Casalta como “La Catorcera” porque ella fue asaltada el 14 de septiembre de 1885, tras un alzamiento militar contra el entonces Presidente del Estado, José María Bermúdez Grau, quien vivía en ella.
Telmo Almada debutó en Ciudad Bolívar como director de la Orquesta Venezuela en un concierto auspiciado por el Almacén Americano en el Paseo Falcón y en el que estrenó su vals “Canciones de Himeneo” que se hizo tan famoso como en Carnaval su fox trot “Mascarada”.  Posteriormente fue Director en varias ocasiones de la Banda Dalla Costa del Estado.
Murió a la edad de 72 años, desolado, deprimido por la tenebrosa oscuridad de .la invidencia, con la sola compañía de uno de sus tres hijos (Telmito) que se dejaba crecer la melena como los hippies, una guitarra y un piano que contrastaba con la pobreza de de una casa abandonada donde vivió el resto de su vida.  Nunca se ocupó de conservar, registrar y legalizar sus numerosas creaciones musicales que él mismo calculaba en 200, las que luego de ejecutar públicamente las dejaba libres como el viento.
Ejecutaba casi todos los instrumentos musicales.  Fue alumno del médico y músico Vicente Peña, padre del crítico musical Israel Peña.  Su biógrafo José Rosalino Flores lo presenta como un artista del sonido que sorprendía por el dominio de la melodía y la armonía y que escribió música popular venezolana en todos los estilos.
En su trabajo titulado “Panorama de la música en Guayana”, Ivo Farfán afirma que Telmo Almada no sólo era músico en el sentido extenso de la palabra sino que también practicaba la filantropía, profundamente espiritual, sobre todo después de las influencias recibidas del que fuera Obispo del Zu­lia, Monseñor Arturo Celestino Álvarez: El prelado lo estimuló para que escribiera música religiosa, es decir,  misas, avemarías, motetes, plegarias, villancicos y aguinaldos. También, por supuesto escribió música profana  como los valses Déjame que te bese, María Luz, Carmen Elena (1960). Canción Otoñal,. Evocación, Nieves (1963). Brisas de mi pueblo,  Primaveral, Confidencia de dos almas, Lucrecia (vals dedicado a su madre),. Nélly, (vals dedicado a la Juez Nelly Márquez (esposa del también abogado y músico Afanador). Romanete, dedicado al violinista Román Iriarte (1961). Canciones de Himeneo, Gloria Josefina, Lirios de Guayana, (1950). Canto de Agonía, Mascarada, fox-trox que nunca faltó en el repertorio de los populares bailes de carnaval, los pasodobles Manojo de Flores y Gentileza, Velencia, España,  que tanto le gustaba a su amigo Juanito Arteta “La trompeta de oro de América” a quien  llamaba cariñosamente “Juanete” y. Lágrimas de amor, dedicado a Catalina García, uno de sus primeros amores allá en su tierra Zaraza, en el lejano año de  1920.
El periodista Abel Silva cuando era un mozalbete trabajo durante siete años (1969.76) como archivista de la Banda del Estado. y confirma lo dicho por Ivo Farfán, de que era un hombre siempre dispuesto a auxiliar no sólo a sus colegas sino a quien realmente demandara su ayuda, pero no obstante era muy exigente con la disciplina y el horario de ensayo y compromiso público y  oficial.



domingo, 24 de noviembre de 2013

La Sub-Región de Imataca


Fundaminas de la Universidad de Oriente, dio a la luz un importante libro (30X22) de 370 páginas, contentivo de los resultados de un estudio sistemático de exploración e investigación realizado durante los años  1965-1997,  por los profesores José Herrero Noguerol y  Guillermo Tinoco M,  con la asesoría jurídico-legal de la abogada Ana Rosa Fernández.
         El Libro bilingüe (español-inglés) calzado con el nombre “IMATACA, Tierra dorada, siempre verde” es una macro visión, técnica y científica, de esa inmensa región que cubre buena parte de los estados Bolívar y Delta Amacuro en una extensión de 36.448,99 kilómetros cuadrados.
         Patrocinado por el gobierno del Estado Bolívar en tiempos de Jorge Carvajal Morales y prologado por el botánico Leandro Aristiguieta, este libro nos sumerge en el conocimiento de una realidad geográfica muy nuestra, eminentemente abundante en agua, de hecho “Imataca” que es voz indígena traduce eso:  “tierra donde brota el agua”,  pero además muy rica en flora, fauna y otros recursos geológico mineros y etnoculturales.  En síntesis, Imataca constituye un “reservorio de inconmensurables riquezas para la Venezuela presente y del futuro”.
         El libro sostiene que Imataca es la subregión más megabiodiversa de Venezuela:  Miles de especies de plantas botánicamente reconocidas; 275 especies de mamíferos  identificados, 1200 especies de aves clasificadas, 225 especies de reptiles,  180 especies de anfibios.  En fin,  un reservorio genético único, todo un nicho cultural.
         En el tema de la fauna destacan  la Baba, la Guacamaya, el Mono Titi, el Gavilán de manglares, el Caimán del Orinoco y el Morrocoy montañero.  Poseedora de especies únicas de fauna como el Águila Harpía, la más poderosa y grande  de las aves de su especie,
         La extensión geográfica de los bosques alcanza un 95 por ciento, de los cuales un 65 por ciento está constituido por árboles con porte entre 5 y 25 metros de altura, una densidad promedio de 75 por ciento,  y en  micro regiones cercanas a los ríos se localizan bosque cuyos individuos alcanzan entre 30 y 40 metros de altura.
         Aunque la sub región ha sido identificada como zona forestal y minera, lo que corresponde a una vocación histórica, tiene otras que no obstante su baja escala de intensidad, es indicativo de la potencialidad como productora de frutos tropicales.
         El potencial geológico-minero está circunscrito al diamante, ilmenita, manganeso, oro, cuarzo y granito.  Las áreas intervenidas por la pequeña minería ejes El Dorado Km 88, Santa Elena de Uairén, Icabarú son objetos de un diagnóstico y a la vez de un plan ambiental de recuperación.
         El 55 por ciento de las reservas forestales de Imataca lo localiza el estudio en Sifontes, por lo que este municipio puede considerarse como un caso representativo del Estado Bolívar en cuanto a su situación geográfica, existencia de grandes potencialidades (biodiversidad, recursos forestales, mineros, hídricos, etnoculturales), lo cual exige una inaplazable ordenación territorial.

“Su heterogeneidad cultural, la movilidad de su población con un asentamiento aún precario, su compromiso emergente como eje de la dinámica futura de Mercosur, y la concurrencia de intereses diversos y de necesarios acuerdos entre las políticas nacionales, internacionales y regionales, son aspectos relevantes que justifican atender con prioridad y decisión su desarrollo sustentable en lo ecológico/ambiental y calidad de vida de sus pobladores considerados integralmente. La localización de la Reserva Forestal Imataca, en su mayor parte ubicada en este Municipio con una superficie otorgada en derechos forestales de 2.292.500 Ha. (12 concesiones). Por otra parte los derechos mineros otorgados por C.V.G. hasta el año 1994 son 257 contratos de encomienda y 91 concesiones mineras por parte del M.E.M., complementan la complejidad de la situación”.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Miss Bolívar 1975


Argelia Ordaz, una estudiante de Sociología de la Universidad de Oriente fue agraciada con el título de “Miss Bolívar” por un jurado del que formaron parte el presidente del Certamen del Miss Venezuela, señor Iván Acosta Rubio, Miss Venezuela 1974, Neyla Moranta y el Director del programa Carlos Moret..
Argelia, de 20 años fue en 1971 reina de Sidor y compitió  con cinco guayanesas tan elegantes y atractivas como ella.
La muchacha de ojos castaños y de pelo largo, 1,72 de estatura,  52 kilos, 90 de busto, 61 de cintura y 90 de caderas. Ella, nativa de Ciudad Piar, lee con frecuencia a los escritores del Boom.
La estudiante, Argelia Ordaz, electa Miss Bolívar confrontó inconvenientes para ser a aceptada como tal por los organizadores del Certamen  Miss Venezuela.
Según lo trascendido, los organizadores del concurso, expresaron disgusto  debido a que se infringieron las normas preestablecidas para la elección de Miss Bolívar.
El presidente del Certamen, Iván Acosta Rubio y Miss Venezuela, Neyla Moranta, viajaron intempestivamente a Caracas y se negaron a firmar el contrato luego del impasse surgido a nivel del jurado y que hasta ese momento no había trascendido al público.
Al parecer la mayoría del jurado se inclinó durante la elección a favor de la señorita Yuraima Vargas para ostentar el título de Miss Bolívar, pero hubo presión a última hora para que no fuese solamente el jurado sino también los aplausos del público los que decidieran la elección.
Estando los aplausos mayoritarios del público a favor de la representante caronicense, esta fue declarada Miss Bolívar y viajo a Caracas para reclamar su participación en el certamen de Miss Venezuela.
La reclamación de Argelia prosperó y figuró oficialmente como representante del Estado Bolívar en el  Miss Venezuela 1975 que se llevó a cabo en el Poliedro de Caracas, el 25 de junio después de semanas de eventos. El ganador del concurso fue Maritza Pineda, señorita Nueva Esparta  Este año fue la primera vez que el concurso de Miss Venezuela fue celebrado en el Poliedro de Caracas.
El certamen Miss Venezuela 1975 fue ganado por la representante del estado nueva Esparta, Maritza Pineda Montoya y las finalistas fueron: María Concepción (Conchita) Alonso Bustillos (Distrito Federal), primera; María del Carmen Yamel Díaz Rodríguez (Carabobo), segunda; Helena Merlin (Barinas), tercera y Virginia Dina Brígida Sipl Raucher (Amazonas), cuarta. Las bandas especiales recayeron en: Mildred del Milagro Galicia Vargas (Falcón), "Miss Amistad"; Maritzabel Grúver (Monagas), "Miss Fotogenia" y Yamel Díaz, "Miss Simpatía, Alonso viajó al "Miss Mundo 1975", en Londres (Inglaterra), Yamel Díaz acudió al "Miss Internacional 1975", en la isla de Okinawa, posesión japonesa en el Pacífico y no clasificó, mientras que Helena Merlin (Barinas) concurrió al "Miss Young Internacional 1975", en Tokio (Japón) y tampoco clasificó. Por su parte, Virginia Sipl (Amazonas) participó en el "Miss Turismo del Caribe y Centroamérica 1975", en Santo Domingo (Dominicana) y fue segunda finalista. De las jónes que no clasificaron Carol Ann Pohudka Parilli (Departamento Vargas) fue al "Reina Internacional del Mar 1975", en Santa Marta (Colombia) y quedó virreina, Ligia Matilde Barboza Quintero (Zulia) viajó al "Reina Panamericana de la Belleza 1975", en Cali (Colombia) y logró ser la quinta finalista.
El incidente  que tuvo Argelia no fue el único,  Más tarde se descubrió que Maritza  Pineda Montoya,  Miss Nueva Esparta, no es nativa de San Cristóbal como se anunció sino de Bogotá, Colombia.  Igualmente se dijo que María Conchita Alonso (Miss (Distrito Federal) era oriunda de Cienfuegos, Cuba.
De todas estas candidatas, la que ha tenido internacionalmente mayor resonancia ha sido María Conchita Alonsoi.


viernes, 22 de noviembre de 2013

Carlos Días Sosa


El periodista, escritor, ensayista  y poeta bolivarense, Carlos Díaz Sosa, murió el viernes 15 en Caracas, a los 82 años de edad.  Era hermano del poeta y crítico de arte Rafael Pineda así como del cronista social de El Nacional, Pedro J Díaz.
Los tres fueron comunicadores sociales como lo fueron sus padres. Blanca Sosa, quien era maestra y tocaba la guitarra. Su nombre lo ostenta una Escuela del sector de Las Moreas en tanto que Zoilo Díaz era telegrafista y agente viajero, de esos que no se aguantan mucho en un lugar y se van con el olvido.
Ausentado el marido, Blanca Sosa, se quedo con sus tres varones  y sus guitarras, más finchada que nunca, tratando de descifrar aquellos signos morseanos de una vida que se estrechaba entre el rio y los arenales de Los Morichales.
Para ello se valió de una escuela privada donde se podían aprender las primeras letras antes de llegar a la “Moreno Mendoza”, reputada escuela dirigida por el Bachiller Felipe Natera que era tan severo como la maestra Natividad Cardozo, de Guasipati, tierra de remanso del tráfago aurífero calloense.
Guasipati entonces parecía toda una calle larga desde la entrada hasta la salida hacia El Callao y con una tranquilidad  bucólica ni siquiera perturbada por la alargada de los discípulos de la maestra Cardozo.
De la capital del distrito Roscio salió toda la familia. Se vinieron  padre, madre, hijos y Ciudad Bolívar se abrió como una posibilidad distinta que a la larga resulto dura por el esfuerzo que debió hacer la madre para suplir la ausencia del padre.
Los tres estudiaron en Ciudad Bolívar y después viajaron a Caracas a completar sus estudios al mismo tiempo que comenzaron a trabajar en El Nacional y otras publicaciones.
Carlos Díaz Sosa se casó con Nelly Lameda, hermana del también escritor Alí Lameda, quien a pesar de ser comunista fue encarcelado durante siete años en Corea del Norte por haberse opuesto a la lucha armada.  Con Nelly tuvo tres hijos.
Su carrera periodística la desarrolló durante muchos años en el diario El Nacional y en Radio Nacional.
Entre sus numerosas obras literarias y periodísticas destacan Tranvía de hormigas y 200 temas de conversación.
Asimismo, Carlos Díaz Sosa fue agregado cultural y de prensa de la Embajada de Venezuela en Reino Unido a finales de la década de los ochenta.
Durante sus últimos años de vida se desempeñó como columnista del diario Últimas Noticias.  Allí,  en uno de sus artículos lamentó la ya inexistente Asociación Venezolana de Autores y Compositores, institución integrada por músicos, compositores y escritores, presidida María Luisa Escobar. En algún momento el maestro Antonio Lauro y el periodista Carlos Díaz Sosa, fueron sus directivos. La actividad era nacional, pero con vínculos internacionales. Colombia, Brasil, México, Chile, Perú, Argentina, Francia, Alemania, Estados Unidos, y de esa manera la importancia de la institución que ahora se ve desarticulada.
En abril de 1975, cuando el poeta Ali Lameda, hermana de su esposa, salió de la prisión en Cora del Norte, fue entrevistado por  el  periodística  e infatigable luchador por su causa, Carlos Díaz Sosa.

Al ser interrogado, Lameda reveló que había sido víctima indirecta de la decisión del Partido Comunista de Venezuela de ir a la pacificación, puesto que esta opción del Comité central del PCV fue respetada por todos los partidos comunistas del mundo, menos los de Cuba, Corea y Albania. Su prisión había sido, pues, una manera de cobrarse esa medida del PCV. Y Fidel Castro no movió un dedo para agenciar su excarcelación o mejorar las condiciones de su retención.





jueves, 21 de noviembre de 2013

Primer Piloto Civil de Venezuela

C5TOPICOS
El 29 de septiembre de 1974, la Dirección de Aeronáutica Civil, dentro del programa de actos elaborado para celebrar el 62º aniversario de la aviación civil venezolana, rindió homenaje en Ciudad Bolívar al capitán Marcos Sarcos Portillo (en la foto), primer piloto civil de Venezuela, el primero igualmente que voló un avión y el primero  que escribió un abecedario sobre la aviación en nuestro país.
         Expresamente vino de Caracas a cumplir con este honroso deber el titular de la Dirección, General Edgar Suárez Mier y Terán,  quien hizo un recuento de la historia de la aviación venezolana y del aporte dado por el Capitán Marcos Sarcos Portillo.  Entonces señaló como nota histórica que el 29 de septiembre de 1912 el aeronauta norteamericano Frank Boland realizó el primer vuelo sobre Venezuela y que en víspera del aniversario de ese hecho él haya firmado un permiso para que el “Concorde”, un avión con dos veces la velocidad del sonido, haga pruebas sobre la  ruta sobre Venezuela.
         Marcos Portillo, un maracucho con muchos años radicado en Ciudad Bolívar y 72 años de edad, comenzó a volar en 1920 en Garden City, Nueva York.  Empleaba un avión de adiestramiento primario “Curtis Jenny 4-D” que desarrollaba una potencia de 90 HP y que podía llevar dos personas en su estrechísima carlinga.
         Ya piloto licenciado, Sarcos Portillo adquirió en 1930 un monoplano “Curtis Wriht Junior” biplaza, y lo embarcó con tan mala suerte, que cuando llegó a Venezuela, el General Gómez se lo decomisó por cuestiones de seguridad.
         A partir de entonces el capitán  Sarcos Portillo fue maestro y guía de los pilotos venezolanos e impulsador de la Aviación Civil, de la que poco beneficio obtuvo.  Aquí en Guayana vino a dar lo último de su experiencia volando aerotaxis hacia la rica región minera de la Gran sabana y luego que la edad le impidió volar, logró un lugar en la administración de una empresa aérea, hasta que la vejez y los males propios de  la naturaleza humana lo recluyeron definitivamente en su casa humilde del bario Las Moreas, donde vivió con su familia rodeado de dignidad, de gloria y de miseria.
         El vuelo de Frank Boland marcó el inicio de la aviación en nuestro país,  mas tarde inspirado por el vuelo pionero de Boland y otros, Gómez introduciría la semilla de la aviación civil, y más tarde crearía la Escuela de Aviación Militar y con ella nuestros pilotos. 
La aviación civil en Venezuela rápidamente se ligó íntimamente a la aviación comercial, la que impulsó el verdadero desarrollo. Sus necesidades obligaron a la construcción de la infraestructura aeroportuaria, las ayudas a la navegación aérea, los radares de control de tránsito aéreo, así como de importantes centros de mantenimiento y entrenamiento aeronáutico. Se debió crear y adoptar una legislación acorde con las normas internacionales, lo que se tradujo en la puesta al día de la aviación en general. 
Pero no será sino hasta el 22 de septiembre de 1972, por iniciativa de un grupo de personas ligadas a nuestra aeronáutica civil cuando sale en la Gaceta Oficial, el decreto por medio del cual se declara el 29 de Septiembre Día de la Aviación Civil Venezolana.

La aviación civil es más que pilotos. Es un inmenso equipo de trabajo con gran mística por las tareas realizadas y por realizar. Al iniciarse el año jubilar por los cien años de su quimera, la Fundación 10 de Diciembre se complace en manifestarle su saludo de reconocimiento fraterno y estamos a su disposición para colaborar con cualquier actividad o evento que estén planificando. 

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Los Túneles de Angostura


El Casco urbano de Ciudad Bolívar, al igual que El Callao, estaría atravesado por túneles.  Estos en razón de la explotación aurífera y el casco por razones de guerra y persecución política.  Lo cierto es que  los de El Callao están plenamente localizados y debidamente registrados en mapas y planos, pero los del centro urbano de Ciudad Bolívar siguen siendo un misterio que estuvo a punto de ser revelado.  Al menos eso fue lo que se propusieron en 1974 el arquitecto Rubén Aguirre y el médico arqueólogo  Eduardo Jahn M.
         Efectivamente, en marzo de 1974 en plena transición del Gobierno del arquitecto Manuel Garrido Mendoza al del doctor Domingo Álvarez Rodríguez, el diario El Nacional de Caracas, a través de mí en calidad de corresponsal, informó del descubrimiento en el empinado casco bolivarense de largos túneles que datan desde los tiempos de la Colonia,
Las bocas de los túneles  habrían sido selladas no se sabe en qué fecha y localizadas en 1974: dos en el alto muro de la Plaza Bolívar, con salidas al altar mayor de la Catedral, a la Gobernación, Cárcel vieja, puerto de Blohm y antiguo Capitolio.
El descubrimiento lo hizo el arquitecto Rubén Aguirre, co­misionado por el Gobierno para la restauración de la Catedral y otros inmuebles coloniales de la ciudad. La pista de los túneles la dio una galería subterránea des­cubierta por niños que jugaban en una vieja casa abandonada de la familia Maestracci, descen­dientes de corso que se instala­ron aquí a fines del siglo diecinueve.
Juan Fajardo (en la foto), un obrero del MOP, sirvió de guía para el levantamiento de los pre-planos de los túneles que él dice recorrió a la edad de doce años con una pandilla de muchachos.
Fajardo aseveró que los túneles tienen trampas y que algunos de ellos fueron utilizados por políticos perseguidos de la dicta­dura de Juan Vicente Gómez y más tarde de la dictadura del General Marcos Pérez Jiménez..
En la limpieza de la entrada del túnel que se halla a partir de un sótano de la antigua casa de los Maestracci fueron halladas bote­llas con la inscripción "Patente" que datan de la época y que se­gún el Dr. Eduardo Jahn en ellas envasaban diferentes tipos de licores importados de Europa.
Por lo menos unos cinco kiló­metros de túneles atravesarían el viejo casco angostureño y los mismos, al parecer, fueron construidos por los españoles cuando se inició la guerra por la Independencia.
El arquitecto Rubén Aguirre prometió en esa ocasión que tan pronto contara con recursos y equipos adecuados se propondría una exploración dete­nida de los túneles con la idea de precisar su historia y ponerlos en condiciones para ser presentados a los visitantes como atractivo turísti­co.
Los gobernantes que han sucedido al arquitecto Manuel Garrido Mendoza no han querido hasta ahora respaldar el proyecto.  Estarían entre los escépticos que creen se trata de un invento o leyenda alimentada por la fantasía novelesca, similar a la que se ha venido tejiendo con relación a una hidra de siete cabezas que mora debajo de la Piedra del Medio.
Donde de veras existen túneles, hechos por mineros a fuerza de ploga, barra y dinamita, en seguimiento de las ricas vetas auríferas, es en El Callao. Alrededor de medio centenar de túneles pasa sin cruzarse por debajo de las típicas y livianas viviendas del pueblo.
Galerías subterráneas bastante profundas comunican  un poblado con otro y tienen longitudes hasta de cinco kilómetro como en el caso del túnel que comunica a El Callao con el campamento minero El Perú.




martes, 19 de noviembre de 2013

Los Farallones Parque natural

1975

El abogado Domingo Álvarez Rodríguez (en la foto), realizó obras perdurables para Ciudad Bolívar no obstante su gobierno de apenas 21 meses.  Obras como la restauración de la Casa del Congreso de Angostura, la prolongación del Paseo Orinoco que evitó la crecida del 76 inundará la ciudad, el saneamiento de la Laguna El Porvenir que hizo posible el Jardín Botánico y habría podido hacer más si la intriga política no lo despacha tan temprano  de la Gobernación.
         Por ejemplo, Domingo Álvarez, quien murió recluido bajo el mayor desprecio en un asilo de anciano de Caracas, hizo todo lo posible porque el Ministerio del Ambiente declarara Los Farallones de Ciudad Bolívar, Parque Nacional, porque por su parte ya lo era y en función de ese concepto tomó la decisión, y en septiembre de 1975 se quedó,  de convertirlo en un Jardín Zoológico  para mostrar a propios y extraños las variadísimas especies representativas de nuestra fauna y flora.
         Este desfiladero, con longitud de 25 kilómetros y una profundidad variante entre 50 y 60 metros de profundidad, siempre por sobre el nivel del Orinoco, es una belleza geológica extraordinaria, pero casi ignorada por la población que poco acceso tiene a esa depresión.  Quienes mejor la aprecian son los tripulantes y pasajeros de las aeronaves que diariamente vuelen sobre la ciudad.
Tal vez por ello, una compañía de espectáculos propuso al gobierno, la concesión de ciertos derechos para instalar un Teleférico, pero la idea lamentablemente no prosperó
         Hay, sin embargo, urbanizaciones en zonas de ensanche  que por estar próximas, corren peligro como los casos de los sectores urbanos “Agosto Méndez” y “Negro Primero”, toda vez que Los Farallones sufren retiros anuales de  unos diez metros, causados por la erosión de los vientos, las lluvias y otros elementos.
En marzo de 1991,  Los ingenieros de la Escuela de Geología y Minas de la Universidad de Oriente alertaron  del fenóme­no de erosión regresiva que acusan los cañones o farallones de los cuatro ríos que atraviesan el área urbana de Ciudad Bolívar.
Por lo menos once barrios y urbaniza­ciones estaban siendo afectados en calles y viviendas sin que de nada hayan valido los rellenos de emergencia, pues el problema según los ingenieros y geólogos es estructural, responde a la llamada formación mesa que es suelo frágil y de escasa consis­tencia.
El problema, aunque venía siendo denunciado con marcada antelación tomó proporciones de alarma al ser exhibido el video de una tesis de grado sobre el proceso erosivo de las áreas adyacentes de la urbanización El Perú. La tesis, basada en un estudio fotointerpretativo del graduando Jesús Benavides, fue re­forzada en el video con opiniones de los profesores Cristino Villazana, María Coromoto Casado, Luis José Candia­les, Pilar Gascón, la ingeniero María Eugenia Díaz y la arquitecto Xiomara Preda, las dos últimas en representa­ción del Alcalde Jorge Carvajal, quien dispuso la realización del video para ser elevado a conocimiento de la CVG y del Ministerio del Transporte y Comunica­ciones, dada la gravedad del asunto.

Entre los barrios y urbanizaciones afectados aparecen El Perú, El Edén, Buena Vista, Las Piedritas, Agosto Méndez, Las Campiñas, La Sabanita, Virgen del Valle, Primero de Mayo, San Rafael y Las Flores. La cuenca de los ríos San Rafael, Buena Vista y Santa Bárbara atraviesan de sur a norte estos sectores por el lado occidental de la ciudad. El río Cañafistola por el lado oriental ofre­ce menos peligro debido a que por estar en zona militar ha habido poca inter­vención civil en su cuenca.  Lo cierto es que Los Farallones acusan un gran avance erosivo año tras año.

lunes, 18 de noviembre de 2013

La Librería “Alarico Gómez”


En 1972, bajo la dirección de la periodista Luisa Barroso (en la foto),  fue inaugurada en Ciudad Bolívar la librería-galería “Alarico Gómez” creada por el INCIBA.
Era la primera en su tipo que se creaba en el interior de Venezuela de acuerdo al desarrollo del programa de librerías-galerías que realizaba el Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes y la Editorial Monte Ávila.
La galería-librería “Alarico Gómez” inicio sus actividades con una exposición de litografías que reunían obras realizadas por catorce artistas nacidos en Europa, América  y Medio Oriente, en su mayoría, estudiantes de la Escuela de Bellas Artes de París y representantes en la actualidad de la generación de artistas de treinta años. Los artistas exponentes eran: Jurgen Ehre de Alemania; Maria Amarac de Argentina; Abraham Pincas de Bulgaria; Francoise Jabour, Michel Potier y J: Ch. Lugder de Francia; Sperantsas y Vassilis Charos de Gracia; Hans Olshoran de Holanda; Lorenzo Pérez de México; Abraham Haddad de Siria; Policarpo Contreras de España; todos aquellos han participado en exposiciones colectivas de carácter internacional y realizado muestras individuales en galerías privadas de Europa y América.
La selección de Litografía con la cual se inauguró la Galería-Librería “Alarico Gómez” de Ciudad Bolívar fue realizada por el artista venezolano Policarpo Contreras.
Respecto al funcionamiento de este novedoso centro de cultura, su directora, Luisa Barroso (en la foto) declaró que con la inauguración de la galería librería, el INCIBA y Monte Ávila  querían llenar una necesidad muy sentida en la Comunidad de Ciudad Bolívar.  Los jóvenes trabajadores y estudiantes comenzaron entonces a tener un lugar de reunión en el que intercambiaban opiniones entre ellos a la vez que lograban información de intelectuales y artistas que visitaban la Galería-Librería.
La librería “Alarico Gómez” duro tanto como el certamen de poesía de la Casa de la Cultura que llevaba ese nombre en homenaje el poeta que en Ciudad Bolívar rompió  los esquemas de la poesía tradicional.
La colega Luisa Barroso regresó a Caracas para integrarse a sus trabajos periodísticos en la prensa nacional y a su librería vino a reemplazar la Fundación Kuai Mare, una red de librería que encajaba dentro del proyecto de Distribuidora Nacional de expandir y descentralizar los servicios culturales, poniendo al alcance de los venezolanos la literatura nacional, latinoamericana y dl Caribe.
La Librería Kaui Mare fue tutelada por la Dirección de Cultura del Gobierno de Andrés Velásquez en 1992 y la administraba el poeta Abraham Salum
La promoción, mercadeo y venta de libros venezolanos, latinoamericanos y del Caribe era el objetivo principal de esta red de librerías, que funcionaba en el país desde el año 1977.  En 1924, debido a que el poeta Salum viajó a Estudiar matemáticas en la Universidad de Guadalajara, la librería quedó en manos de la poeta Teresa Coraspe, quien la ubicó en un espacio de la Casa de la Poesía y de la Asociación de Escritores.
Al final la librería Kuai Mare fue absorbida por la Fundación Librería del Sur fundada el 19 de abril de 1983 en el Teatro Teresa Carreño.
Está adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Cultura y va más allá de ser sólo lugar para la venta de libros, sus instalaciones, aunque no tan holgadas como debería ser,  se han convertido en espacios donde el ciudadano tiene la posibilidad de acercarse al libro necesario, a la lectura y a la cultura.
En el Estado Bolívar, la Librería del Sur, tiene puntos de venta en Santa Elena de Uairén., Upata, Ciudad Guayana y, en Ciudad Bolívar, específicamente en la Casa Casalta de las galerías porticadas del Paseo Orinoco..