sábado, 20 de noviembre de 2021

LOS MORICHALES DE CIUDAD BOLÍVAR

Hasta la mitad del siglo veinte, el centro o Casco Histórico de Ciudad Bolívar estaba rodeado de la palmera Moriche formando hileras interminables en las quebradas y pantanos formado durante el período lluvioso y eventuales desbordamientos del Orinoco. Con el tiempo y construcción de la Avenida Táchira, las elegantes palmera fueron desapareciendo, asimismo los campos llamados “Morichales“ y, por supuesto, los cogollos que arrancaban o hacían arrancar las Doñas para tejer sus chinchorros y la cosecha de sus frutos con los que campesinas como doña Paula elaboraban artesanalmente el turrón y carato infaltable en los Velorios de la Cruz de Mayo. Hay una anécdota que recoge el libro “Memoria de un niño latinoamericano”, escrito por Exio Saldivia según la cual, en una de Los Morichales donde había varias aves Guacharaca, muy agresivas, llamada así por su canto onomatopéyico, ocurrió que un niño acostado sobre una estera bajo un frondoso árbol del patio, iba a ser agredido por una de las Guacharacas y lo salvo milagrosamente y por instinto materno un perro llamado RinTin Tin, nombre tomado de una película que narraba las aventuras de un perro que así se llamaba y que pasaban en los cines América, Mundial y Royal. (AF).

domingo, 7 de noviembre de 2021

EL MUSEO MÁS VISITADO DEL MUNDO

Un 9 de noviembre, como hoy, pero de 1793, se inauguró el Museo del Louvre, uno de los Museos más Visitados del Mundo. Yo visité ese Museo en 2012 en compañía de Lesbia Granadillo, Rosita Pérez Yépez y Riolama Fernández Claro, lo primero que admiré fue la sonrisa enigmática de la Mona Lisa de Miguel Ángel y tuve que a codazo limpio abrirme paso en el tumulto. Igualmente, un día como hoy, pero de 1902, nació Lucila Palacios, escritora bolivarense, primera mujer embajadora de Venezuela. País Uruguay, entonces llamado el oasis de la democracia en América. 23 años después, por la misma fecha nació Jack Kilby (1923), Ingeniero eléctrico y físico estadounidense, reconocido junto con Robert Noyce, como el inventor del circuito integrado o microchip, inventor asimismo de la calculadora de bolsillo y la impresora térmica. Grandes Inventos de la Humanidad de los cuales disfrutamos en la actualidad y, por supuesto, no podemos olvidarnos de la inauguración la Central Hidroeléctrica Raúl Leoni a la cual, años después el Teniente coronel Hugo Chávez le cambió el nombre y para que nadie se opusiera, le calzó el de Central Hidroeléctrica Simón Bolívar (1986), lo cual merece una Gaita, una gaita crítica obviamente, pues hoy también es el Día del Gaitero. (AF).

lunes, 1 de noviembre de 2021

LUDOVICO SILVA Y LA MUERTE

Ludovico Silva, poeta y filósofo, estudioso de Karl Marx, considerado uno de los intelectuales venezolanos más importantes del siglo veinte, visitó Ciudad Bolívar en 1988, poco antes de su muerte y en un reservado del Hotel Laja Real donde fue hospedado, se reunió con el poeta John Sampson, Saúl Andrade, José Laurencio Silva y Américo Fernández. Durante ese encuentro se abordaron varios temas, incluso el de a Muerte y decía el filósofo animado por el escoses que nunca faltaba en aquellos días, que su gran tormento era que quería vivir eternamente y así lo expreso en un poema escrito a los 18 años. Luego reflexionó: “Hoy no sé qué pensar, la muerte me rodea por todos lados Da vueltas constantemente en torno mío y no sé qué hacer. Estoy confundido Aun me quedan restos de mi antigua creencia cristiana en la vida después la Muerte, y en 1a resu¬rrección de la carne; pero también me apesadumbra un escepticismo interior que me hace sufrir, porque me doy cuenta de que no creo realmente en nada de eso. Siento cómo por dentro se me corroe la materia humana, y estoy impotente. Tengo una enfermedad que podríamos llamar como cierta novela: "el mal metafísico", porque no tiene cura. Al menos, yo no se la he en¬contrado, tras largos años de lucha. La manifestación más horri¬ble de este destino es la melancolía en que vivo, y el deseo de no ver a nadie, ni hablar con nadie. La literatura, que era mi con¬suelo, he llegado a odiarla” . Ludovico murió el 8 de diciembre de 1988. .(AF)