lunes, 16 de enero de 2017

El Intérprete de Mussolini vino a parar en Ciudad Bolívar

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"Soy un hombre que padece las miserias del exilio, pero he de volver a Italia cuando algún industrial fascista se decida a ayudarme, mientras tanto vivo de las baratijas, duermo en la pocilga de un taller y doy cuen­ta de mis penas a Dios en el san­tuario de la Catedral". Así se ex­presó ante mí un hombre de baja estatura, de piel fina, blanco y semi-calvo que ner­viosamente se desplazaba por las afueras de la Catedral ofrecien­do estampas del santoral y otras curiosas baratijas que atraen a la gente ingenua. Unos ojos ver­des destacan sobre las mejillas sonrosadas y el rostro redondo. Tal es Angelo Bruni Olivini, un italiano de 55 años de edad que domina cinco idiomas, que fue, según me dijo, intérprete del dic­tador Benito Mussolini, pero que era en 1967 un exiliado.
Circunstancialmente conocí a este hombre. Me lo pre­sentó mi compadre Genaro Gianoccoro, italiano que lo cono­cía desde cuando ambos milita­ban juntos en el partido de las camisas negras. Bruni resultaba ser un hombre que escribía poesía e hilvanaba bien su pensamiento en un castellano para él todavía di­ficultoso.
Días después me lo volví a encontrar y me habló de su vida y de la negativa colabo­ración de sus paisanos para lo­grar un estado de vida acorde con su profesión de maestro de idiomas. Hablaba francés, alemán, inglés, árabe y el castellano. Entonces llevaba 15 años en Venezuela y apenas dos meses en Ciudad Bolívar.
         En el curso de la conversación se lamentaba de los errores de Mussolini como el de llevar a Italia a la guerra, contrariando el senti­miento general del pueblo.  Para él fueron factores determinantes de esa decisión, su afinidad de pensamiento con Hitler y la ex­periencia decepcionante que tu­vo Italia de Francia y de Ingla­terra en la Primera Guerra Mun­dial.
Ese personaje sir­vió de intérprete al Duce en al­gunas ocasiones durante los dos últimos años que precedieron a su muerte.  Se hallaba en Milán, en el Palacio del Carde­nal Ildefonso Schuster, cuando conversó con Mussolini y el Mariscal Graciani para ofrecerse como intermediario entre los aliados y el gobierno italiano:  Los aliados habían ya inva­dido las llanuras del Po y el Ma­riscal Graciani, previendo lo peor, se quedó en el Palacio, sal­vando así la vida, mientras que Mussolini por desoír las insinua­ciones del Cardenal resultó víc­tima de fanáticos fascistas que lo engañaron haciéndole ver que en las montañas de Valtellina había fuerzas suficientes para insistir en la lucha.
Benito Mussolini seria preso más tarde al tratar de huir por Suiza en un convoy alemán. Señala al Comandante Bill y al Coronel Valerio —nom­bres de guerra— como los ejecu­tores del dictador italiano. Valerio era en ese año se­nador en Italia y Bill se halla en la Argentina.
Recuerda que junto con Mus­solini fue ejecutada también Cla­ratta Petacci.  Los cadáveres de ambos trasladados a Milán y colgados por los pies en la Plaza Loreto.
La tumba de Mussolini, sin nombre, fecha ni cruz, fue vio­lada por fanáticos que burlaron la vigilancia de los guardias y luego de sacar el cadáver del Duce, lo escondieron durante años en un Convento de Milán, hasta cuando su hija, Condesa Ciano, hablando con el Papa Pío XII consiguió trasladar los restos al Cementerio de Predappio, lugar donde nació.
El desolado intérprete de Benito Mussolini, vivía miserablemente en Ciudad Bolívar, pero esperanzado de volver a la Pe­nínsula para  afiliarse al Movimien­to Social Italiano que represen­ta las ideas mussolinianas, pero será "¡Sabe Dios cuándo!" tal vez —nos dijo-como náufrago afin­cado a una esperanza— “cuando algún industrial fascista se de­cida a ayudarme, mientras tanto vivo de las figuritas del santoral.


1 comentario:

  1. lo conoci en ciudad piar vendiendo baratijas en el centro civico al lado del comisare, le oi hablar muchas cosas de la guerra, enrique damico dueño de la cafeteria le daba comida, como dice americo fernandez hablaba varios idiomas porque le oi hacerlo con muchos extranjeros que venian al centro civico de distintas nacionalidades

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