viernes, 2 de octubre de 2015

PIAR PRESO Y FUSILADO

Un 2 de octubre ocurrió la aprehensión de Manuel Piar (1817), en Aragua de Maturín, por el oficial Manuel Cedeño y remitido a la Angostura del Orinoco para ser pasado por las Armas días después de un juicio. Una vez apresado, el general Manuel Cedeño comisionó al coronel Juan Francisco Sánchez para que, con un escuadrón de carabineros, condujera a Piar hasta el Cuartel General de Guayana, donde sería puesto a la orden del Libertador, mientras él iba a entrevistarse con el General Rafael Guevara y otros disidentes en Cumanacoa. Piar fue conducido a Guayana. Llegó a la Plaza de Angostura la noche del 3 de octubre de 1817 y recluido en uno de los inmuebles, al norte de la Plaza, que servía de despacho al Estado Mayor. Debidamente informado el Libertador, quien permaneció en vela toda la noche, decidió poner a Piar en manos de Carlos Soublette, en calidad de Fiscal y Juez con la siguiente documentación adjunta: “Señor general de Brigada Jefe de Estado Mayor general, Carlos Soublette. Señor general: El señor general Piar, acusado de los crímenes de insubordinado a la autoridad suprema, de conspirador contra el orden y tranquilidad pública, de sedicioso, y últimamente de desertor, debe ser juzgado conforme a nuestras leyes. Como en virtud del artículo 4º capítulo 3º del reglamento de 29 de mayo último corresponde a Ud. instruir el proceso, procederá US a ello a la mayor brevedad en clase de Juez Fiscal, hasta poner la causa en estado de ser juzgada por el Consejo de Guerra que se nombrará oportunamente para su decisión, con arreglo al mismo capítulo 3º del citado reglamento. El capitán ciudadano José Ignacio Pulido actuará en calidad de secretario. Los trece adjuntos documentos impondrán a Ud. de la conducta y atentados del acusado. US hará de ellos en el proceso el uso que es debido. Dios guarde a Ud. muchos años. Cuartel General en Angostura a 3 de octubre de 1817.- 7º Bolívar”. Contra la sedición Oficios sobre el mismo asunto y en la misma fecha cursó el Jefe Supremo a los generales José Francisco Bermúdez, Pedro Zaraza y José Tadeo Monagas. Piar será juzgado y castigado conforme a las leyes y el general Mariño tendrá la misma suerte. Para acabar de conjurar los elementos de sedición y de guerra civil, ha decidido la conveniencia de que el general Bermúdez pase a Maturín para encargarse del mando de la Provincia de Cumaná. En función de conciliación y pacificación, Cedeño, quien había salido con su escuadrón a entrevistarse con los oficiales disidentes afectos a Mariño y Piar, logra que el general Guevara y demás jefes que mandan las tropas de Cumanacoa se sometan y marchen a Maturín para ponerse a las órdenes de Bermúdez y así lo hace saber al Libertador el 30 de septiembre, pero éste responde que: “no es suficiente que el general Guevara y los demás jefes que mandan las tropas de Cumanacoa hayan obedecido la orden de V.S. de marchar a Maturín. Es necesario aprehender a Mariño. Sin esto, veremos nacer nuevas diferencias y pretensiones que destruirán lo que tanto nos ha costado. El general Mariño está en Günimita con una partida para marchar sobre Güiria, y solo cuando Ud. pierda la esperanza de aprehenderlo, se contentará en entrar en negociaciones con él y admitirá que reconozca el Gobierno; pero antes es necesario apurar todos los recursos y emplear todos los medios que le dictan a Ud. su celo y su prudencia para lograr su captura”. Piar fue fusilado el 16 de octubre de 1817 en la Plaza Mayor de Angostura, hoy Plaza Bolívar, al lado de la Catedral de Ciudad Bolívar, por órdenes del Libertador. (AF)

No hay comentarios:

Publicar un comentario