El 23 de octubre de 1959, el Concejo Municipal del entonces Distrito
Heres, a solicitud de la AVP, Seccional Bolívar, creó el Premio
Municipal de Periodismo “Dr. J. M. Gómez Rengel” para ser otorgado el 24
de octubre de cada año, Día del Periodista y aniversario de la Gaceta
de Caracas.
Con el nombre del doctor J. M. Gómez Rengel, porque fue éste su
creador, siendo presidente edilicio y conforme al acuerdo promulgado el
año anterior se otorgó ese año de 1959 por primera vez, a los
periodistas José Antonio Fernández, director del diario El Bolivarense;
Lorenzo Vargas Mendoza, director del diario El Globo y Joaquín
Latorraca, reportero de El Bolivarense (los tres en la foto). El Jurado
estuvo integrado por los concejales José Francisco Miranda, José Roberto
Lozano Villegas y Jorge Huncal Ramírez.
El nuevo acuerdo creando el Premio Municipal de Periodismo “J. M.
Gómez Rengel”, establecía premios para el periódico local más destacado
del año, Premio al Mejor Reportero y Premio al Mejor Columnista. Estos
consistían en diploma de honor y medalla de oro “y tendrán como base la
información, reportajes y la selección de los que por su naturaleza se
consideren que han cumplido la función social y específica de la
prensa”.
Los premios fueron adjudicados en sesión especial de la
Municipalidad, presidida por el presidente Miguel Vicente Trotta y por
la noche en el Club Buena Vista “La Piscina”, el Ejecutivo y la
Municipalidad conjuntamente ofrecieron un agasajo a los miembros de la
Asociación Venezolana de Periodistas.
La directiva de la AVP la integraban como secretario general el padre
José Van Grieken; Organización, Evaristo Marín; Finanzas, Joaquín
Latorraca; Relaciones, Diógenes Troncone; Actas, Alonso Aro; vocales:
Raúl Silva y el Padre Luis R. Biaggi. Tribunal Disciplinario: Lorenzo
Vargas Mendoza, Adán Blanco Ledesma y José Antonio Fernández.
Lorenzo Vargas Mendoza (foto en el extremo derecho) cubrió su fase de
buen periodista en la Ciudad Bolívar de los años cincuenta y sesenta y
su fase de Cronista en Petare del estado Miranda, pero muy vecino de
Caracas donde solía cumplir sus trabajos de investigación internado en
el Archivo General de la Nación, dirigido por el doctor Mario Briceño
Perozo, fundador de la Escuela de Archivología de la Universidad Central
y uno de los directores del Liceo Fernando Peñalver de Ciudad Bolívar.
Lorenzo Vargas Mendoza, casado con una hermana del doctor Ramón
Castro Mata, fue secretario del Concejo Municipal de Heres y allí siendo
presidente don Brígido Natera Ricci, se asoció con éste para fundar en
su cuarta época El Bolivarense que comenzó a finales de la década de los
años cincuenta siendo semanario y el primero de diciembre de 1957
transformado en diario matutino.
Luego, Vargas Mendoza que soñaba con un periódico propio, vendió sus
acciones de El Bolivarense a don Brígido Natera Ricci y fundó el
matutino “El Globo” apoyado, entre otros, por el doctor Diego Heredia
Hernández, René Vhalis y el profesor José Simón Escalona. El periódico,
con sede en un inmueble de la Avenida 19 de Abril tuvo una vida corta, y
Lorenzo Vargas Mendoza se vio obligado, luego de liquidar el taller
para pagarle a los trabajadores gráficos, a recoger sus bártulos y
residenciarse en Caracas donde la suerte le deparó los espacios de la
Municipalidad de Petare, para erigirse allí como cronista de fluida
producción. Uno de sus libros lo dedicó a los primeros periódicos de
Guayana. De tanto explorar la vida del pasado entre antiguos expedientes
minados de traza y hongos, perdió el sentido de la visión y murió
invidente como su colega Arístides Bastidas.