jueves, 30 de noviembre de 2017

Edecanes del Bronce del Liberador


Extraño tal vez, pero lo cierto es que el Libertador hasta no hace mucho tenía edecanes. Al menos, en Ciudad Bolívar, sentados por las noches en los bancos de estilo romano de la Plaza Mayor, podíamos verlos frente a la estatua sobre cuya piel de bronce desliza, verde matizada, la pátina del tiempo. Aquí en la capital del Orinoco, afortunadamente, no hay palomas como en la plaza caraqueña. Las aves de esta parte del territorio parecen más respetuosas a la hora de anidar o defecar, pero, en todo caso, tampoco se atreverían siendo que en torno a este cuadrilátero histórico, aún sin su presencia total, reposan vigilantes los ojos de los edecanes.
       Edecanes, sin más uniformes que sus comunes trajes de parroquianos, que buscaban componer al mundo con sus tertulias diurnas o nocturnales que recuerdan a José Luis Aristeguieta y al grupo “Aureoguayanos” sentado, no en bancos romanos sino bulevares, tratando, con el libro de Breton entre sus manos, de combatir la poesía que divulgaba la revista Alondra de la maestra Anita Ramírez.
       Pedro Anastacio Collins Linche, Cesar Alcalá Mérida, Ignacio Freites, Héctor Roldan, Nahim y Ana Nakkul, Abrahan Saloum, Víctor Salazar, Nicolás Palermo,  los hermanos Tufic, entre otros, no sabían mucho de poesía como la gente del otrora grupo Aureoguayanos. Tal vez, Abraham Salloum Bitar que sabía hablar de la mística del principio de la noche. Ellos mejor que la poesía, dominaban el tema político y sobre política fundamentalmente solían discurrir sus noches, mejor aún si eran de luna llena y el presidente del grupo, Pedro Anastacio Collins, se encargaba temprano de leer la prensa y conversar con los jefes de las fracciones parlamentarias de la Asamblea Legislativa. No olvidemos que Pedro fue durante diez largos años diputado y en 1963 Presidente de la Cámara.
       Urredista-jovitero desde su tiempo de estudiante en la Miguel Antonio Caro y Pedagógico de Caracas, Collins advertía, no obstante, que los “edecanes” del Libertador, a la hora de entrar a la Plaza, tenían el deber de  deslastrarse de todo prejuicio partidista, es decir, se olvidaban de sus respectivos partidos si es que los tenían aún cuando el tema principal casi siempre era el de la política, lo importante –decía- son las ideas desde el punto de vista filosófico, vale decir, partiendo siempre de lo que debe ser. El Libertador, obviamente, era el gran inspirador con su doctrina bolivariana y sus grandes puntos de coincidencia con la realidad venezolana.
       Pedro Collins, se manifestaba orgulloso de ser el fundador y animador de este grupo que los citadinos conocían como “Los Edecanes del Libertador”, pero temía que desapareciera debido a sus quebrantos por un lado y a que otros se habían alejado del Casco Histórico por creer que les asentaba mejor el clima de Los Morichales. Cuando uno viaja a Caracas y sube de visita al Panteón Nacional, se da cuenta que la Nave Central, coronada por una imponente lámpara de cristal de Bacarat, hospeda la urna cineraria en bronce, del artista español Chicharro Gamo, que contiene la osamenta del Padre de la Patria, elevada sobre un pedestal de mármol, y a los lados, las tumbas de sus edecanes: General Andrés Ibarra, General Pedro León Torres, General Carlos Soublette, General Daniel Florencio O´Leary, Lic. José Rafael Revenga. Sus edecanes siempre al lado aún después de muerto.  Por supuesto no son todos ni fueron estos los únicos.  Ellos lo fueron en vida, pero luego de muerto el Libertador quedó el bronce en el centro de las plazas donde también encontramos otra figura del Edecán, los que frecuentan, cuidan y dan vida a las Plazas con su sola y cotidiana tertulia que habla de sus glorias.(AF)


martes, 14 de noviembre de 2017

EL ESCUDO DE EL CALLAO

 

Mediante un Concurso Público promovido por el Presidente edilicio Víctor García Burgos, con la participación de  personas de la comunidad vinculadas a su historia, costumbres y tradiciones, fue escogido y aprobado por la Cámara Municipal en sesión ordinaria del 20 de junio de 1995, el Escudo Oficial del Municipio el Callao.
Dicho Escudo, rediseñado por el artista plástico Carlos Betancourt, como emblema oficial, está integrado por tres cuarteles: dos  superiores y uno inferior. El primer cuartel superior derecho con fondo amarillo  simboliza la riqueza del Municipio.  Tomando en cuenta a El Callao es zona minera aurífera, es observable  en el mismo el mineral de aluvión, la ba­tea, la pala, el pico,  la barra de oro, la torre y la entrada a la mina iluminada con el sol del Yuruari. El segundo cuartel superior izquierdo de color azul destaca  el clásico balón de fútbol y en el centro del mismo la figura de un futbolista vestido de camiseta amarilla de rayas negras y pantalón negro, simbolizan­do en general el deporte popular de este municipio iniciado en 1876 y que se tiene oficialmente como el primer partido de fútbol en Venezuela.
El cuartel inferior completa con el fondo de color rojo, la posición socio-cultural del Municipio Au­tónomo El Callao privilegiando la figura del minero trabajando la veta del mineral, la Madama tradicional, las festivas y carnavalescas figuras folclóricas del  Diablo y el Negro Pinto más superpuesto  los contornos de la geografía municipal con estos elementos.
El escudo tiene en su parte superior dos cornuco­pias entrelazadas que simboliza la abundante riqueza mineral y cultural la zona.
Al lado derecho del escudo está la figura de una pala y al lado izquierdo un pico, implementos utilizados por el pequeño minero.
A ambos lados del Escudo dos plantas agrícolas cultivadas en el lugar, unidas y sostenida en su parte inferior por una cinta de los colores simbólicos de Venezuela sobre la cual sobresale la fecha del 7 de diciembre de 1991 cuando El Callao fue elevado a la categoría de  Municipio Autónomo del Estado Bolívar.(AF)

viernes, 10 de noviembre de 2017

El Escudo de Guasipati


Escudo de guasipatiA partir del seis de junio de 1994, el Municipio Roscio, cuya cabecera es Guasipati, adoptó su actual escudo, diseño del Licenciado Leopoldo Villalobos Boada, seleccionado en un certamen convocado al efecto por el Concejo Municipal de esa entidad geopolítica del Estado Bolívar.
El dicho escudo dispuesto entonces por una Ordenanza, lo describe su autor de la siguiente manera: “Consta de tres campos: En la parte superior izquierda, un indio caribe, en representación del habitante autóctono que poblaba esa zona donde los misioneros capuchinos catalanes, fundaron a Nuestra Señora del Rosario de Guasipati, el color de fondo amarillo oro, la riqueza que genera tantos recursos en la zona. En la parte superior derecha, la imagen de Nuestra Señora del Rosario, la patrona de Guasipati. Debajo de ésta, la inscripción “27 de septiembre de 1757”, cuando fue fundada la mencionada Misión por los frailes catalanes, en color azul celeste.
        En el campo inferior, un grabado del doctor Juan Germán Roscio, que denomina al Municipio Autónomo y quien fue legislador en los congresos de 1811 y 1819, este último en la antigua Angostura, actual Ciudad Bolívar, escritor y periodista en el Correo del Orinoco.
        El escudo delineado así: arriba, dos zorros guaches, porque Guasipati en ancestro indígena caribe, significa lugar donde  abunda el zorro guache.
        Abajo, al lado izquierdo, “3 de septiembre de 1881”, y al lado derecho, “14 de diciembre de 1900”, cuando Guasipati fue la capital del Territorio Federal Yuruary en dos ocasiones de dicha creación.
        El escudo está circunscrito en color marrón oscuro, en símbolo del río Yuruary que ha pautado la historia económica, política, social, cultural, de la región.
        En los bordes del Escudo, hay floraciones del bucare y frutos del merey, exponentes de la flora características del medio físico donde fue fundado el pueblo de Guasipati”
        Leopoldo Villalobos, cronista emérito, de Ciudad Guayana, igualmente es el autor de la letra del Himno de Gusipati, su tierra natal  desde el 15 de noviembre de 1928, lo mismo que lo es de los poeta Rafael Pineda y Jean Aristeguieta.   Guasipati es uno de los pocos municipios del Estado Bolívar que tiene  himno, bandera y escudo..
        El Himno de Nuestra Señora del Rosario de Guasipati  con música de Orlando Sifontes, lo describe Leopoldo as: En el coro figura el indio Caribe, primitivo hombre habitante con quien los capuchinos catalanes fundan la Misión de Nuestra Señora del Rosario de Guasipati.
El nombre de Roscio es el emblema del actual Municipio Autónomo. Antiguamente fue Departamento Roscio, después Distrito hasta su actual denominación.
En la parte primera de las estrofas, se destaca la flora del bucare que junto al árbol del merey predominan en el medio donde fue fundado el pueblo bajo la advocación de N.S. del Rosario. Enseguida hay referencia acerca de la altura donde fue establecida la Misión. Así mismo, se habla de San Félix porque en esa batalla que ganó el General Piar contra La Torre, el 11 de abril de 1817, hubo participación de indios de las Misiones del Caroní, incluidos los de Guasipati.
En la segunda estrofa,  las minas auríferas del Yuruary estuvieron bajo la jurisdicción de Roscio y por ese motivo, Guasipati fue capital del Territorio Yuruari en dos ocasiones.
Por otra parte, se mencionan los recursos forestales, ganaderos, agrícolas, de la región. Se destaca la tradición intelectual de la zona, la de ser pionera en la educación minera a escala nacional, como ha sido reconocida en los centros superiores de enseñanza, y así como que nuevos municipios han nacido del antiguo Distrito Roscio.
En la estrofa final se incluyen los valores del trabajo, el desarrollo, la significación de Roscio en un mundo de paz, justicia y libertad, como patrimonio histórico de Guayana!



       



jueves, 9 de noviembre de 2017

Francisco Battistini. Fundador de la Escuela de Medicina


Francisco Battistini, nacido en Ciudad Bolívar el primero de septiembre de 1917, realizo los primeros estudios en su Ciudad natal luego sus padres resolvieron radicarse en París para terminar de darle allá la formación de sus tres hijos.
Francisco fue inscrito en la Academia de Medicina de Francia y terminó sus estudios en la Universidad de Montpelier después de la Segunda Guerra Mundial, donde tuvo participación como soldado hasta 1940 que se dio la violenta batalla de Dunkerque.
En Francia contrajo matrimonio con la señorita Louisette Villod, quien falleció en Ciudad Bolívar. Con ella tuvo a Ana Maria, médico dermatólogo como su padre, única hija, casada con el urbanista Claudio Brun Maxlimilien, nativo de Haití que fue colonia francesa.
Al doctor Francisco Battistini las autoridades de la UDO lo enviaron a Brasil, Perú y Colombia para estudiar experiencias en el campo de la docencia de la medicina. Elaboro el primer pensum de las Escuelas de Medicina iniciado el 8 de enero de 1962 con tres profesores (Battistini, IIdemaro Torres, Eduardo Cárdena) y 80 alumnos.
De estos ochenta alumnos sólo diez llegaron a la meta profesional. En diciembre de 1966 fue la primera promoción, la cual apadrinó.
El doctor Francisco Battistini, además de fundador de la Escuela de Medicina, fue entre 1958 y 1991, jefe del servicio de dermatología del Hospital universitario del Ruiz y Páez. Fundador del primer Post-Grado de la Escuela de Medicina (Dermatología 1977); dermatólogo consultante de la Universidad del Estado Louisiana  de los Estados Unidos en 1967. En el campo de la investigación ha hecho importantes aportes, especialmente de la medicina curativa.
Descubrió un tópico rápido y eficaz en el tratamiento contra la micosis o enfermedades de la piel, causada por hongos. Se trata de un compuesto que antes de salir al mercado estuvo en ensayo en las Escuelas de Medicina de Ciudad Bolívar, Bogotá y Miami. El medicamento comenzó a estudiarlo en 1968 y antes de que los laboratorios M. Johnson  de los Estados Unidos lo sacara a la venta pública, estuvo ensayándolo durante dos años en colaboración con los especialistas norteamericanos, doctores Nardo Zaias y Aguerrí Revell.
Mientras fu Director de la Escuela se preocupó por la formación del médico general contra la inclinación de la mayoría de los egresados de escoger el camino de la especialización.   Se quejaba entonces de las carencias que aún persisten como la producción por la presión ejercida sobre las autoridades para aceptar a una gran masa de estudiantes no considerados en la planificación. De tal manera que la Escuela de Medicina ha sido victima de la masificación y esto ha traído repercusiones en la enseñanza y los programas.
A sus distinciones Orden Congreso de Angostura, Orden Andrés Bello y premio César Lizardi, se suma la del Rotary Club Orinoco.(AF)


miércoles, 8 de noviembre de 2017

Perfetti, Coche y la Gran Sabana

 


JOSÉ NANCY PERFETTI Y ALUMNOS ESTUDIAN GEOLOGÍA DE  LA ISLA DE COCHE
José Nancy Perfettti fue el fundador y primer director de la Escuela de Geología y Minas del Núcleo Bolívar de la Universidad de Oriente.  La concibió y planificó sin rígido academicismo y distinta a la tradicional.  Pero debido a problemas internos derivados de la turbulencia política de los años sesenta, el doctor J. N. Perfetti abandonó la Dirección de la Escuela y se dedicó por entero a la docencia, a la investigación de campo y al laboratorio.  No hubo puente ni oportunidad de asueto que no aprovechase para salir con sus alumnos a estudiar cualquier lugar importante de la geografía venezolana, bien en el Escudo guayanés como en  los Llanos, los Andes,  o en la región de la Costa.
         En 1982 estuvo en Coche y Cubagua con un grupo de alumnos tratando de terminar estudios iniciados en 1974 sobre la formación de esas islas, para demostrar alteraciones en la Cartografía junto con su antiguo alumno José Herrero Noguerol, estuvo dirigida a demostrar la tesis según la cual el Orinoco primitivo desembocaba por donde lo hace hoy el Unare.
         Y lo cumbre es que a donde llegaba se hacía querer y dejaba alguna huella.  Lo recuerda intensamente Froilán Lunar, el pescador más famoso de la Isla de Coche como asimismo los indios de la comunidad Pemón que moran por los alrededores de la Quebrada de Pacheco en la Gran Sabana.
         Nos cuenta divertidamente Noraima Caraballo, una de  sus alumnas, que allá por la Quebrada de Pacheco acampaba el doctor Perfetti con sus alumnos practicando prospecciones cuando miembros de una comunidad indígena se acercaron a su campamento en busca de asistencia para atacar un brote de sarampión que se desataba en la población infantil.
         Perfetti, a quien nunca le faltaba cuando iba por esos sitios un anillo de seda en el dedo para preservase de rayos y tempestades como un buen surtido de medicamentos para cualquier emergencia, le sirvió de médico, enfermero o chamán a aquella comunidad y la salvó.
Los indios agradecidos le pusieron a una senda de la Quebrada de Pacheco “Camino Perfetti” y a todos los niños liberados del sarampión, el nombre de Perfetti.  De suerte que el Profesor solía exhibirse muy contento y orgulloso del suceso, pero a veces se veía en serio compromiso cuando alguien creía de veras que los indios Perfetti eran realmente sus hijos.
Para la egresada de la Escuela de Geología y Minas, Noraima Caraballo, quien lo acompañó siendo estudiante en varias excursiones, siempre con una indumentaria característica de su manera espontánea de ser, a veces con sombrero de corcho o una gorra y cachimba, el  doctor Perfetti era simplemente “un genio irresistible”.
         El  doctor Galo Yanez lo calificó como un líder que dedicaba todo su tiempo a la creación de esta Escuela, que actuó de la única manera como se hacen bien las cosas, dándose por entero la cristalización de los ideales. Alumnos y Profesores tuvieron la suerte de inflamarse con su entusiasmo y seguir por caminos geológicos acertados, gracias a su oportuna guía magistral. En todo cuanto decía y escribía Perfetti, había siempre una profunda y robusta raíz científica.         
         J. N. Perfetti nació en Ciudad Bolívar el 13 de agosto de 1916 y falleció en 1992, a la edad de 76 años.      (AF)