Luis Gilberto Lara parece ser el único cineasta parido en tierra del Orinoco. No creo conocer otro. Despertó su vocación en el Cine Club fundado por José Joaquín Latorraca y desde entonces no ha cejado a pesar de los vientos fuertes de la vida. Por lo visto, es como el junco que se dobla pero sigue en pie, a decir de la canción del Dúo Dinámico hispano.
Gilberto Lara encontró en el Cine Club su camino y a medida que
avanzaba fue robusteciendo su experiencia,
tanto aquí como en Caracas, metrópoli del cine venezolano. Vino su primera
prueba de fuego: "Historia Vulgar de Venezuela”_ con
Henry Córradini en calidad de camarógrafo y Elio Rubens, figura principal, como el
General Lara, yo era su lugar teniente
en esta película rodada sobre el bucólico escenario de La Arcadia (antiguo chalet de Antonio Liccioni en la
Avenida San Vicente de Paúl), pero jamás subió a cartelera porque a los
distribuidores les parecía escasamente
comercial, lenta y pesada. La segunda fue una cinta sobre el Rock que
también corrió con mala suerte. El eterno problema de los distribuidores.
Seguidamente "Píntalo de Negro" que aparentemente dio en el clavo, pues agradó a los
distribuidores y cuya Premier fue a
beneficio de la Cámara de Comercio. Entró en cartelera el comenzar el año
1989.
Este
acierto impresiono tanto a
distribuidores y productores que se pensó
en la posibilidad de montar una empresa de cine en Ciudad Bolívar. Entonces
surgió PRODUFILM. (Productores de Películas)
para trabajar en sociedad con la empresa de cine mexicano PELIMEX. En
ella estuvieron envueltos los empresarios Rodolfo Sánchez, dueño de Optomicrón
y vicepresidente de la Cámara de Comercio; su hermano
Julio Sánchez, Marcos Flores y
Ezio Rampini, entonces Presidente de la Cámara de Comercio.
En “Píntalo de Negro”
trabajó Félix Loreto como protagonista y Flor Núñez de contrafigura. También Héctor Mayerston como figura principal y Pedro Lander. Los demás actores y actrices, incluyendo a tres niños, fueron todos de Ciudad Bolívar
al igual que el Camarógrafo Charles Flores y
el Director y Guionista de la
película, Luis Gilberto Lara, por supuesto.
La película ciertamente impactó a los primeros espectadores por su
sonido, la música reforzando la imagen, el lenguaje muy plástico y escaso de
diálogos y esencialmente'
su tema, el drama social de una mujer que se ve forzada a la práctica de la prostitución para poder alimentar' a dos hijos que nunca
conocieron la paternidad y soñaba con buscarle
un buen padre a sus hijos. Al fin lo
encuentra en un perseguido que ha caído
herido en su entorno. Lo auxilia, lo lleva a su casa y en el mejor de
los momentos cálidos y afectivos, el Perseguido muere de un disparo en la
frente. La película se encuentra con un
final dramático, al revés de las clásicas novelas.
Luego de Píntalo de negro, Gilberto comenzó a rodar
su cuarta película "Miseria Blues” para la cual
escenificó un rancho en la Casa de la Cultura. De trataba de una historia del mismo corte de Píntalo de Negro, sobre la infancia
abandonada, protagonizada por Irene Arcila,
la misma que trabajó en "Macho y
Hembra"; Pedro Lander, Willian
Moreno y actores, de Ciudad Bolívar, entre ellos, Pedro
Fajardo, Gustavo Basanta Elena Contreras. Pero hasta allí. El proyecto no pudo continuar, surgieron inconvenientes. Podríamos concluir en que sólo fue un sueño o el entusiasmo de querer darle a Ciudad
Bolívar un rango creador dentro de la cinematografía venezolana. Luego que no fue posible la empresa PRODUFILM,
Gilberto Lara pretendió una planta televisiva, pero le pusieron piedras en el
camino y se dedicó finalmente a rodar publicidad y documentales como el reciente
de la Cámara de Comercio, para el cual escribí el guión y la animación estuvo a
cargo de César Pérez Rosssi. (AF).