jueves, 31 de mayo de 2018

Angostura cambia de nombre


30 de mayo de 1846.  El Congreso de la República presidido por el senador Rafael Enríquez, decretó que la ciudad de Angostura, Capital de la Provincia de Guayana, se denominara Ciudad Bolívar.
      El decreto, ejecutado el día siguiente por el Presidente de la República Carlos Soublette, comenzó a cumplirse con todas las formalidades públicas del caso el 24 de junio del mismo año.
      Tanto el Congreso como el Presidente de la República fueron de esa manera receptivos a la solicitud que en tal sentido formuló con fecha 19 de enero de 1843 un grupo de destacados ciudadanos angostureños encabezado por el entonces gobernador Ramón Burgos, el obispo Monseñor Mariano Talavera y Garcés, el Rector del Colegio Nacional, Valenzuela, Antonio y Juan Bautista Dalla Costa, Siegert y Ascención Farreras.
      Los considerando del decreto del congreso resumen las razones expuestas por los angostureños para el cambio de este nombre por demás histórico y que ha costado al pueblo desprenderse de él.
      Los angostureños argumentaban y se lamentaban que el decreto del Congreso de Angostura, ratificado posteriormente en Cúcuta, para que la Capital de Colombia se denominara Bolívar, nunca tuvo efecto y que mientras el Alto Perú había pasado a llamarse República de Bolivia y en algunas ciudades del Ecuador y de los Estados Unidos se honraba al Libertador denominando ciudades con su nombre, en Venezuela, en cambio, no había provincia, una ciudad, un pueblo, ni una villa que se llamara Bolívar, lo cual consideraban una terrible mengua para la república.
      Insistían los habitantes en su documento de que “Angostura tiene motivos particulares para llevar este nombre a gusto, porque ella fue la segunda cuna de la independencia y el asilo de los patriotas errantes en países extranjeros: porque aquí empezó la época más gloriosa de Bolívar y porque aquí sacó los recursos para liberar la Nueva Granada y el resto de Venezuela”.(AF)





domingo, 6 de mayo de 2018

Día Internacional del Reportero Gráfico



DÍA INTERNACIONAL DEL REPORTERO GRÁFICO
El Día Internacional del Reportero Gráfico se celebra en Venezuela el 6 de mayo. Fue en esa fecha para el año 1943 cuando se fundó el Círculo de Reporteros Gráficos, mientras que el resto del mundo lo hace el 19 de mayo. 


Entre los nombres que hicieron historia dentro de la profesión se destacan Vigilio Azuaje, Arturo Bottaro, Nicolás Bracho, Teófilo Rojas y Robinson de la Hoz. También se reconoce la labor de Henrique Avril, quién se destacó como el primer corresponsal gráfico de la ciudad de Puerto Cabello y de Venezuela, por su labor como fotógrafo documentalista, fotografiando a todos sus personajes, rincones y costumbres.


El reportero gráfico se encarga de captar los diversos acontecimientos informativos por medio de las fotografías que ilustrarán los diferentes géneros periodísticos.  El reportero debe tener un amplio manejo técnico de su equipo, para poder tomar decisiones instantáneas al cubrir un evento.
Paciencia, agilidad y determinación son las primeras tres cualidades que deben tener un reportero gráfico. 


Sin los reporteros gráficos el escrito quedaría en el periódico y no en la mente de los lectores, por eso se celebra el Día Internacional del Reportero Gráfico en Venezuela. (AF)


viernes, 4 de mayo de 2018

La Cruz Verde


Lo que en un principio llegó a llamarse Barrio Cruz Verde es actualmente una calle que comienza en el Paseo Meneses  (Olegario Meneses, Catedrático del Colegio Federal de Guayana y uno de los hombres que hicieron por el progreso de las ciencias físicas y matemáticas de Venezuela) y termina en la Avenida Táchira.  Atraviesa el Paseo Heres interfiriendo la Calle Cardozo (Juan Vicente Cardoso, primer Alcalde de la ciudad).  En este punto y antes de construir la calle, los morichaleros veneraban una Cruz a la cual le hacían velorio durante el mes de mayo, siguiendo la tradición al igual que con la Cruz del Perdón, la Cruz del Temblador, de los Culíes y de la plaza del  Convento o Centurión.
En centro de la Avenida fue erigida a la Cruz una Capilla construida en 1938 como promesa ofrecida por el Señor Ignacio Fornerino, quien gracias al Madero, según su creencia, quedó definitivamente librado de los dolores lumbares que venía padeciendo.  Laboraron  en la construcción de la Capilla el maestro de obras Tomás Domingo Trías y los albañiles Desio Trías, Andrés Adames y Cosme Trías.
Antiguamente  el sector de la Cruz Verde pertenecía al Barrio San Isidro, un arrabal formado en las inmediaciones de la hacienda propiedad original de Rafael Vélez (1776) y cuyos predios se extendían hasta el Cerro La Esperanza y la Mesa de Angostura.  En la hacienda había un Oratorio a San Isidro.  La imagen de madera que todavía se conserva, data de la Colonia y era objeto de animadas fiestas  el 15 de mayo Día de San Isidro.  El doctor Ramón Isidro Montes, publicó en 1876 este canto morichalero: “Ya viene el 15 de mayo / que es la fiesta del patrón / Pidamos una limosna /para hacerle su función / Para que digamos todos / implorando su favor /  ¡San Isidro,  San Isidro,  San Isidro Labrador! (AF)

jueves, 3 de mayo de 2018

Cruces Populares


Podríamos decir que en Mayo la Ciudad se llena de Cruces.  Además de la Cruz Verde, sobresalen, la Cruz del Perdón, en la orilla del Orinoco;  de los Culíes o las Mercedes (en la foto), de la Plaza del Convento (Centurión), Temblador, El Zanjón, Cerro del Chivo, y La Lorena que  persisten en la memoria popular bolivarense.  Y no son como al principio simples maderos de la ocasión de Mayo sino reliquias con leyendas a las que la fe del pueblo ha erigido altares y capillas para que se eternicen en el tiempo.
La Cruz en el terreno del antiguo Convento de los Franciscanos fue eliminada en 1967 para construir la actual Plaza Centurión. Permanecía esta cruz desde entonces en el patio de la casa de Catalina Yánez de donde fue rescatada  para volverla a la Plaza en una especie de altar diseñado por el artista Rafael Torrealba..
De estos velorios, los más animados  son los de la Cruz Verde, la Cruz del Perdón y Las Mercedes. La Capilla de la última es la única donde se realizan oficios religiosos. El Vicario Apostólico, Monseñor Samuel Pinto Gómez, llevaba años oficiando la misa el 3 de mayo, a las siete de la noche en la Calle Las Mercedes en medio de gran alborozo animado por la chicha y los cantos. Pero para la Iglesia no es el 3 de mayo el día de la Cruz sino el 14 de septiembre. La Iglesia viene haciendo la exaltación de la Cruz ese día desde el Siglo V.
En los velorios bolivarenses del pasado reciente, era bastante familiar ver a músicos y cantores populares como Nicanor Santamaría, el Negro Bambalá, Siete Puyas, Agapito Blanco, Mónico Rivilla, Juan Parra, Juan Delgado y Alejandro Vargas, casi todos perrosequeros, pegados con carupaneros y margariteños en un ardoroso duelo de galerones, décimas y fulías.
Músicos y cantores comenzaban desde el 3 de mayo calentando los motores en la Capotera que hoy se llama calle Peñalver y luego al anochecer cuando la chicha de arroz, carato y caratillo de moriche estaban en su mejor punto, se oía la voz del cantador.

                  Dios te salve Cruz Divina
                  árbol de la redención
                  amparo de los cristianos
                  consuelo de salvación
                 
                  En el altar de los santos,
                  la Cruz es la más bonita
                  porque tiene su corona
                  y en el brazo una ramita


La fiesta de Cruz de Mayo es parte del folclore de nuestro pueblo. Comporta un valor sociológico en el que se revela el sentimiento del hombre de campo, del mar y de las zonas semiurbanas, asociado  con sus vivencias, creencias y costumbres.
Es una fiesta profana, distinta a la que tiene lugar en la Iglesia. Cuando a la Cruz de Mayo se le ha erigido capilla, sólo hay que abrir la reja para que permanezca accesible durante el mes de mayo y prenderle cirios. Cuando no, se saca la Cruz de la casa donde se guarda, se instala en un lugar de acceso público, se le construye una enramada de palmas de cocotero o moriche y se le adorna con ramas, bambalinas, flores y otros paramentos. Luego viene lo demás: las bebidas típicas del lugar, tabaco, ron, café y los cantos tocando diferentes temas del saber popular en la que sobresalen el Galerón y la Fulía. Los músicos suelen interpretar también Polo, Malagueña, Jota y Décimas.(AF)